lunes, febrero 19, 2007

¿Depresión o inspiración?

Pues aquí me tienen de nuevo comunicando lo que pienso (y deseo compartirles, pues hay miles de cosas que guardo para mí) en este útil espacio en la red para que quienes lo encuentren y lo lean consideren lo que digo (claro, esa es mi meta, no digo que todo aquel que lo lea lo haga, lo cual es no tan bueno). Y es hoy, en este lindo amanecer en el cual deseo comentar otra de esas "incógnitas" al estilo de mi primera entrada (no forzosamente con referencias de la RAE) en este blog y es, como ya se imaginarán, la cuestión planteada en el título (¿O si no para qué sirve el título?).

Como dicen por ahí, iré directo al grano, al punto, a la idea central de esta entrada: de lo que me he percatado desde ya hace varios años (y creo que es algo obvio pero aún así vale la pena mencionarlo) es de la relación entre la depresión y la "inspiración" de las personas y es algo muy curioso pero es una relación casi de dependencia (es decir la llamada inspiración depende muchas veces de la depresión). ¿Y por qué digo esto se preguntarán? Bueno pues por razones muy obvias:

Comenzaré conmigo mismo, contándoles una experiencia personal que ejemplifica de manera ideal el caso planteado y es que he tenido dos blogs anteriores a este (no, ninguno de los que tienen vínculo en este blog) y ambos se originaron tras la reciente (en ese momento) necesidad de desahogar multiples "penas" y pensamientos que me mantenían con un caracter apático y depresivo. Y aunque ambos blogs no tuvieron una larga vida ni una enorme cantidad de entradas, todo el tiempo tenía ideas para escribir, y cuáles eran, se estarán preguntando, pues cualquier tema que lidiara, aunque fuera de forma muy parcial, con mis ánimos depresivos, cualquiera de esas ideas me daba "inspiración" y muchas ideas para escribirla de la forma más dramática (que algunos llaman poética, aunque en lo personal no lo considero así) posible. Era muy claro y fácil de apreciar la forma en la que estas "actitudes" o estados de ánimo (y digo estados porque era una tendencia a la depresión, no estaba en una depresión constante) me "ayudaban" a escribir, me porporcionaban una vista diferente del mundo que combinada con mi ya conocida forma de pensar daban resultados buenos en cuanto a lo escrito, pero sólo me perjudicaban.

Ahora, pasando más allá de mi ejemplo, se pueden apreciar miles de ejemplos de reconocidos y maravillosos poetas, compositores, autores de libros (o también de otros blogs), incluso la maravillosa costumbre atribuida a las mujeres (aunque muchos hombres lo hacen, sólo que no lo dicen) de escribir un diario, en muchos de esos casos lo que se escribe esta basado en la tragedia, por ejemplo: la mayoría de la gente cuando se divierte y disfruta la vida, constantemente está ocupada y no tiene tiempo para un diario, pero cuando las cosas se ponen mal y no hay con quien desahogarse que mejor que pensar las cosas y darse un tiempo para uno(a) mism(a) y su diario.

Veamos dos ejemplos de canción:

Uno se cree, que los mató el tiempo y la ausencia pero su tren vendió boletos de ida y vuelta (Serrat, 1971).

Oh where, oh where can my baby be? The Lord took her away from me (Cochran, 1962).

Podría poner una larga lista de ejemplos, pero sería muy casado para mí el buscarlos y para ustedes el leerlos así que sólo les dejo la idea que ya mencioné antes. Ambas canciones son muy conocidas por personas que saben de música (es decir por personas que escuchan cosas más allá de Rebelde, Panda, Britney Spears o Paris Hilton), y reflejan un alto grado de melancolía y nostalgia, lo cual no significa que sean malas, sólo que esta influencia depresiva causa una mayor captura de atención del público (si no me creen escuchen los villancicos la siguiente navidad y verán que tampoco son muy alegres en su mayoría) y me hace volver a plantearles la pregunta inicial: ¿Es acaso la inspiración el equivalente a la depresión? o mejor dicho ¿Existe una relación directamente proporcional entre la depresión de alguien y el resultado de lo que haga bajo la influencia de su "inspiración"? Es decir: ¿A mayor depresión, mejor inspiración?

Me despido y como siempre les invito a que me consideren como alguien con un punto de vista diferente (o tal vez igual al suyo pero diferente al de las masas) y mantengan la mente abierta a las nuevas propuestas, las juzguen [no, no y no, no juzguen de forma objetiva, ni los diccionarios lo hacen (lo entenderán los que leyeron la entrada sobre la libertad y el libertinaje), juzguen de acuerdo a sus intereses y a lo que creen conveniente sin rayar en egoísmo], y finalmente decidan.

2 comentarios:

Eternal Distortion dijo...

Interesante entrada, creo que es muy cierto todo. Mushos en algun episodo de nuestras vidas nos hemos sentido as´, sin saber por donde ir y yo personalmente he estado así, hasta inicie un diario y me sorprendía de lo que escribía. Para algunas personas es bueno este estado por que se dan cuenta de muchas cosas que antes no apreciaban.

Violet dijo...

jajaja interesante. Difiero un poco de tu opinión, no necesariamente tienes que estra deprimido para encontrar inspiración, también puedes estar muy feliz, o muy enojado, enamorado o aburrido... Si son emociones intensas, eso ayuda, pero creo que no hay que generalizar que si estamos deprimidos estamos muy inspirados, eso sería caer en estereotipos (aguas)... Pero si, tienes razón, generalmente se asocian, pero no es una condición...